Médicos del Hospital Regional Antonio Musa de San Pedro de Macorís trabajan de forma precaria debido a que no tienen ni siquiera escritorios adecuados para brindar las consultas a sus pacientes.
Los consultorios médicos no tienen ventilación, ni abanicos ni aires acondicionados. Además, los techos están a punto de desplomarse y sucios.
La endocrinóloga Luz Castro dijo que en el Antonio Musa «ni siquiera hay personal de limpieza» que pueda habilitar los consultorios.
«No tenemos luz, no tenemos abanicos, no tenemos ni siquiera dónde podamos lavarnos las manos. Aquí yo vengo y consulto sin nada de eso, es una situación fuerte«, lamentó la doctora.
Indicó que lleva varios años trabajando en esas condiciones, al tiempo que dijo que el techo de su sala de consulta prácticamente le está cayendo encima.
Mientras, Fernando Álvarez Santana, médico neurólogo, precisó que en el hospital «tampoco hay sillas adecuadas donde sentarse».
«Mire cómo está esa silla donde yo estoy sentado dando consultas, casi en el suelo, y la condición de aglomeración que hay aquí es caótica», sostuvo.
Santana dijo que los pacientes de neurología, psiquiatría y hasta de cardiología están todos juntos.
«Todo eso (la aglomeración) va en contra de la salud de los pacientes, porque en un lugar donde se atiende a pacientes vinculados a la salud no puede haber ese hacinamiento y deben haber áreas con ventilación», dijo.
Usuarios se quejan
Tras un recorrido de Diario Libre por el Hospital Antonio Musa, algunos pacientes se quejaron de las condiciones del centro de salud.
Aseguraron que tienen dificultades a la hora de ir a sus consultas médicas, puesto que el calor y el polvo en el hospital les hacen daño.
«Esto aquí es un fuego, sin abanicos ni nada. Mire cómo estamos todos amontonados y se pasa mucha lucha», añadió la paciente Luz Alba.
¿Qué dice la dirección?
El director de dicho centro de salud, Ane Maríñez, explicó que el hospital está actualmente en un proceso de remodelación y, debido a esto, las condiciones no son muy buenas.
«Estamos trabajando en todas las áreas de salud, tenemos buenos equipos. Los elevadores estaban dañados y recientemente entregamos unos nuevos, lo cual era una situación que llevaba muchos años», dijo.
En cuanto a la comida de los médicos, explicó que se elaboró un menú en conjunto con los doctores para que eso no sea un inconveniente más.
Sostuvo que el hospital ha estado en proceso de reconstrucción desde la gestión pasada, alrededor de ocho años, pero que en este Gobierno se ha avanzado bastante.
Reconoció que falta personal médico en el centro, y están a la espera de algunos nombramientos para solucionar esa situación.