El Partido Nuevas Ideas oficializó el domingo la candidatura del presidente Nayib Bukele para los comicios de febrero de 2024, en donde buscaría su reelección por otros cinco años a pesar de que abogados constitucionalistas y políticos opositores aseguran que la carta magna prohíbe la reelección en El Salvador
«Anuncio al país que oficialmente nuestro presidente Nayib Bukele ha sido elegido como el candidato a la presidencia del partido Nuevas Ideas para participar en las elecciones del 2024. Presidente Nayib Bukele, bienvenido a casa», dijo el presidente del partido, Xavi Zablah al concluir las elecciones internas del partido oficialista, en las que también se hizo oficial la candidatura del vicepresidente Félix Ulloa.
Bukele recurrió a Twitter la noche del domingo para ratificar el anuncio y convocar a sus partidarios a las urnas.
«Dicen los medios de (George) Soros que los salvadoreños no pueden decidir por sí mismos. Pero hoy habló el partido más grande en la historia de nuestro país y el 4 de febrero de 2024 el pueblo salvadoreño tendrá la última palabra. La democracia se escribe de abajo hacia arriba», manifestó el presidente Bukele en su cuenta oficial de Twitter.
Ulloa declaró recientemente que una vez que se oficialice la candidatura de Bukele, el mandatario tendría la obligación de pedir permiso al Congreso para ausentarse del cargo antes del 1 de diciembre, seis meses antes del inicio del periodo presidencial en El Salvador.
A su vez, el Congreso también se vería en la necesidad de elegir a la persona que ocuparía el cargo durante la licencia de Bukele.
Bukele anunció que buscaría la reelección en septiembre de 2022, un año después de la decisión de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, designada por sus aliados en el Congreso.
La constitución prohíbe la reelección presidencial, pero en su resolución, la Sala interpretó que un artículo de la carta magna permite que la participación del presidente en la contienda electoral por una segunda ocasión y que será el pueblo quien tome la decisión en las urnas.
La Sala también ordenó al Tribunal Supremo Electoral dar cumplimiento a la resolución. Casi de inmediato, el tribunal afirmó que acataría esa disposición.